Un coche a 120 Km/h y un guardia civil persiguiendolo.
Asi se tiran 300 kilómetros, al final el coche se para, el guarda civil se baja y le dice:
– A ver los papeles – los revisa con muy mala leche y finalmente dice – pero si está todo correcto ¿por qué huía?
– Verá…. es que la semana pasada mi mujer se fue con un guardia civil y yo creí que era usted que venía a devolvérmela!